jueves, 21 de mayo de 2015

LA ESTRELLA QUE HACE GUIÑOS

Había pasado ya más de una luna desde que SHATZY había emprendido su gran viaje hacía la luz. Resonaban en sus oídos las últimas palabras de su humana..."Tranquila, todo irá bien, te queremos. volveremos a vernos, sé feliz". Había caído en un sueño profundo y al final de la oscuridad vio una luz brillante como un arco iris y varias figuras recortadas a contraluz que la llamaban....Aquellas siluetas le eran tan conocidas que se sentía como en casa. Ya ni siquiera se sentía cansada ni le dolía nada.
"GATSBY?, TUSHA?...que hacéis vosotros aquí?".
"Jajajajaja, la vieja pregunta", dijo GATSBY, el enorme gato peludo pelirrojo.
"Bienvenida , hermana", dijo TUSHA, el gato gris de largas patas y ojos profundamente verdes, "te estábamos esperando y pedimos venir a buscarte. BIENVENIDA A GATTIKA"


Durante varios días vagaron por la vieja ciudad de GATTIKA, tan vieja como el mundo de los humanos, hasta llegar al gran templo en la montaña y ciudad de los gatos primigenios.
Cientos de gatos de todos los colores y razas, todos diferentes y todos un mismo ser, reunidos a la luz de una enorme luna amarilla, se dispusieron a escuchar la historia que Shatzy tenía que contar...la historia de una promesa cumplida.


"Fue aquella mañana cuando me  fallaron las patitas al subir al armario cuando me  di cuenta que algo no iba bien. Me encantaba verlo todo desde arriba...
Llevaba tiempo que me encontraba mas cansada y había adelgazado bastante.
Una tarde vinieron de visita dos humanas que llevaban una maleta negra y me sacaron un líquido rojo de una de mis patitas.
A partir de ahí, siguieron muchas cosas que no me gustaban...no entendía porqué mis humanos, a los  que tanto quería y con los que siempre había sido tan feliz, me pinchaban en la espalda y me ponían en la boca aquél líquido blanco tan amargo. Solo quería que me dejasen tranquila. Yo sabía que había llegado mi momento de dejarlos pero no quería que sufriesen. Por eso me iba alejando de ellos. Ya ni siquiera dormía con ellos para que se acostumbrasen a estar sin mi.
Para que les fuese más fácil sobrellevar mi ausencia, incluso había hecho todo lo posible para encontrar a mi sucesora. Yo era parte de una saga..."La promesa tricolor". Mi humana prometió a mi antecesora, APACHEE, que siempre tendría una gata tricolor. Primero APACHEE, luego yo, SHATZY y luego....
Había una pequeña gatita tricolor que era perfecta....MELINA.


Ahora que la había encontrado, ya podía emprender mi viaje más largo.
Aquella tarde cuando mis patitas empezaron a convulsionar, supe que era el final. No quise irme sin despedirme de mis humanos y , haciendo un esfuerzo, desperté.
Me llevaron a un sitio desconocido donde todo era blanco. Oí a mis humanos que hablaban con aquellas personas que habían venido de visita. Estaban muy serios. Lo que siguió fue una conversación sin palabras entre mi humana y yo. Ella me dio las gracias por 16 años maravillosos y miles de buenos momentos. Me dijo que la perdonase por aquellas cosas que yo no entendía y  no me gustaban y finalmente me dijo que era libre para ir en paz y seguir mi camino. Nos miramos profundamente a los ojos. Yo vi el universo en sus ojos y ella en los míos. Un universo de cariño que nunca desaparecería. Yo traté de mostrarle que siempre estaría ahí para ella. Después entré en un sueño profundo y su voz me dio mucha paz y me acompañó durante todo el trayecto hasta aquí..."Tranquila, todo irá bien, te queremos. volveremos a vernos, sé feliz".
Se que no me van a olvidar, ni yo a ellos".

Sentada erguida majestuosa sobre una de las grandes piedras del templo estaba una gata tricolor de pelo largo y ojos entornados. " Te saludo SHATZY, yo soy APAXIA, la Gran Bibliotecaria. En mi vida pasada fui llamada APACHEE e hice un largo viaje con tu humana, cruzando el Gran Mar del Oeste.
Tus humanos nunca dejaron de quererte ni querían hacerte daño. Entiende que ellos lo intentaron todo por no perderte. Muchas veces los humanos ven el futuro de una forma diferente a la nuestra. Para nosotros el tiempo no existe, solo son vidas sucesivas. Para ellos, el futuro es una gran incógnita que les atemoriza".
"Conozco la promesa y puesto que supiste esperar hasta cumplirla, te voy a hacer un regalo muy especial. A partir de esta noche, tu humana siempre verá en el cielo una estrella muy brillante. Tu le harás guiños y la guiarás a casa cada noche. Aunque haya miles de estrellas, ella solo te verá a ti. Sabrá que eres tu y sonreirá cuando piense en ti.
La grandes ojos risueños de Shatzy se iluminaron con una gran sonrisa.
Hizo un guiño y....alguien allá abajo estaba mirando al cielo y sonriendo.