sábado, 28 de febrero de 2009

Sombras en la noche

Bajo la brillante y fria noche de final de Febreo , varias oscuras sombras acechan a alguien que está cada vez más próximo. El mernsajero vaticinó que una nueva maga llegará en cualquier momento al bosque de HUNDERTAUGEN. Sus compañeras, las siete SABBATS, la esperan con curiosidad .


Tal como dice la antigua profecía:
Llegaron y luego se fueron , las ocho sabbatts.
Un año, un dia, una vuelta entera de estaciones.
Seguiste el sendero,
y mira lo que hallaste:
un círculo de amigas que son tuyas.
Ya no eres novicia, has aprendido y crecido
El espíritu y la magia te han hechizado
y enraizado aún más en la sagrada tierra.
Llegas a la próxima marca en el camino.
Sigue adelante con total confianza,
en la seguridad de la asamblea. ven y ocupa tu lugar.
desde ahora todo será como sabías que debía ser´cuando por primera vez pusiste la mirada en el espacio sagrado.
NAOMI, las esperada, la gran SABBAT, había por fin llegado a su destino. el círculo se había completado y la profecía debía cumplirse.
Muy lejos de allí, GATSBY no podía dormir aquella noche. Contemplaba la misma fría luna de Febrero que alumbraba Hundertaugen y se preguntaba si sería la misma que verían sus queridos humanos. Esa noche hacía exactamente dos años que había llegado hasta aquí. Ellos lo habían sido todo para el. Fueron sus padres cuando era tan tan pequeño como un ovillo de lana, luego sus amigos y compañeros de juegos.... ¿Cómo olvidar los casi 10 años que habían compartido, y tantos buenos recuerdos?. Era en noches así, cuando le invadían los recuerdos, cuando sentía que solo un tenue velo separaba los sueños de la realidad, cuando la nostalgia le abrumaba y le entristecía.
Solo le consolaba el convencimiento de que ellos no le habían olvidado. Podía sentirlo a diario, pero aquella noche, casi podía tocar lo que fue su mundo con las aterciopeladas patas del recuerdo. Si cerraba los ojos, podía inmtuir cada objeto de su casa, oir la respiración rítmica de AMO y notar el olor del pelo de AMA que tanto le gustaba. SCHATZY dormía también sobre la cama y OBI, fuera en el pasillo. Seguro que seguía tan travieso como siempre y aún no había logrado entrar a domir en la gran cama por las noches. También TUSHA y SCHATZY tuvieron que pasar un tiempo hasta que lograron ganar la confianza de Amo y Ama.
Suspiró profundamente y se estremeció por el frio de la noche. Miró a su alrededor, como volviendo a la realidad. Sus amigos dormían a su alrededor, acurrucados unos contra otros para darse calor.
Habían pasado dos meses desde la Navidad y no se habían decidido a dejar a Roakin. Las navidades habían sido tan tristes para el, que decidieron quedarse con el por más tiempo, hasta que su ánimo comenzase a mejorar. Poco a poco, con tiempo y la ayuda de buenos amigos, lo iba consiguiendo. Talo vez pronto pudiesen emprender de nuevo el camino.