domingo, 1 de abril de 2007

Mundos lejanos de fuego y hielo








































Reconozco que había quedado muy impresionado por el relato de aquellos extraños mundos, así que después de comer y, mientras los demás echaban una cabezadita, aproveché para seguir interrogando a mi amigo DANDY.

G.: "Por cierto, amigo, porqué no me cuentas algo más sobre los nueve mundos. Todavía hay muchos puntos oscuros para mi en ese relato."

D.: "Bueno, supongo que para alguien que aún es nuevo aquí, es algo complicado". " Te lo contaré, pero con la condición de que la próxima vez me cuentes tu historia. Recuerda que me lo prometiste."

G.: "De acuerdo, de acuerdo, pero quizás, podrías contarme, de dónde procede todo ese universo, o mejor, cómo empezó todo?".

D.: " Según cuentan las antiguas leyendas, contadas por gatos muy viejos y sabios, en un principio solo existía LA NADA, un vació inmenso como el universo. De pronto, en un instante y como si fuera deseo de algún ser superior, todo cambió. Se oyó un gran estruendo, como un BANG ensordecedor y el negro vació se hizo luz y se convirtió en millones y millones de puntitos centelleantes. Uno de ellos es nuestro universo.
Una pequeña semilla, llegó volando. Nadie sabe de donde procedía. De esa semilla, poco a poco, salío un tallo verde que muy pronto se convirtió en un inmenso árbol. Ese árbol es conocido como Igdrasil, que quiere decir, el origen de toda la vida o el primigenio. Es la representación entre el equilibrio perfecto entre la materia y el espíritu".

G.: "¿Como pudo llegar una semilla de la nada?. ¿Es quizás ese el árrbol de inmensa copa que cuentan que existe en alguna parte?"

D.: "La semilla se formó en algun lejano mundo. Primero una célula, luego dos y así.... "Dicen que Igdrasil no se encuentra sólo en nuestro mundo. Su tronco también desciende hasta el mundo de los humanos y sus raices descienden hasta los mundos inferiores de fuego y hielo. Dicen las leyendas, que están guardadas por feroces criaturas."
G.: "Díme amigo, como son los demás mundos?"
D.: "Bueno, yo solo conozco Asgard y el mundo de los humanos. Asgard es el cielo, el mundo de la felicidad.
El mundo de los humanos está poblado también por otros seres, que los humanos intuyen, pero no pueden ver y forman parte de su mitología popular. Los llaman duendes, elfos, enanos, gigantes, etc.. Son mundos paralelos. Según dicen, el mundo de los humanos, está rodeado por un mar primitivo, en el que habita Jormung, una enorme serpiente encargada de no permitir que nadie cruce el puente del arco iris. Sólo muy pocos lo han conseguido y, siempre, con riesgo de su vida. Sólo es posible cuando Jormung está dormido, lo cual ocurre solo en noches de eclipse. Algunos, se precipitan al vació exterior. Si salvan su vida podrán volver a nacer, pero a veces convertidos en otra criatura diferente a la que fueron".

Gatsby quedó pensativo y callado durante largo rato. Dandy lo miraba con tristeza. Sabía perfectamente las ideas que pasaban por la mente de su amigo. No en vano llevaba ya cinco años allí y había pasado antes por todo aquello. Decidió romper aquel silencio.
D.: ¿"Quieres saber algo mas sobre los mundos de fuego y hielo?. Bueno, como ya te conté, el mundo de fuego o HELLA, es el mundo de los seres dañinos y negativos, aquellos que hacen el mal sin verdadera razón. El mal por el mal. Es un mundo de magma ardiente en el que cada cual estará condenado a hacer aquello que más odió en vida. Ese será su castigo"


G.: "¿Y el mundo de hielo, vive alguien allí?.




D.: "El mundo de hielo es la tierra de desolación o de las nieves eternas, siempre en semioscuridad. Es allí donde viven "Los ERRANTES, aquellos seres que en su vida anterior nunca quisieron a nadie ni se sintieron queridos. Aquellos que tan solo vivieron para si mismos y su egoismo y que estarán condenados a vagar errantes por esa gélida tierra y a llorar con lágrimas de hielo hasta que sean capaces de actuar con generosidad, al menos una vez".
G.: "Vaya, no suena muy atractivo, ¿verdad?. En el fondo, supongo que a pesar de todo tenemos suerte.

D.: "Si, no lo dudes. Aquí casi siempre hace buen tiempo, la comida es excelente y te quedan aún muchos amigos interesantes por encontrar. Ya verás como te acaba gustando".
Gatsby escuchaba pensativo y quedó sumido en sus propios pensamientos. Dandy se enroscó sobre si mismo. En el fondo, ya conocía demasiado aquella historia.