jueves, 22 de noviembre de 2007

La ciudad en la niebla








































Conforme nos íbamos acercando, la densidad de la niebla iba en aumento. Nos era imposible imaginar lo que pudiera haber al otro lado, así que íbamos los los siete muy juntos, para no perdernos en aquella masa algodonosa. Hacía frío y aquella niebla húmeda nos calaba hasta los huesos. Al cabo de un tiempo, la niebla dió paso a enormes nubarrones grises, pero la visibilidad, mejoró algo.
De pronto, nos hallamos ante la puerta de una fortaleza de piedra recia. Entramos sin ningún obstáculo.
Tras atravesar el foso y una enorme fuente, apareció ante nosotros un precioso jardín con setos recortados y fuentes con figuras mitológicas.
Desde un muro, cercano al palacio, nos observaba una gata de largo pelaje perlado y ojos azules. Sentada en un banco, y en actitud tan estática que parecía una estatua había una preciosa gata gris rayada y junto a ella un majestuoso gato pelirrojo.
La gata de ojos azules fue la primera en dirigirse a nosotros.
"¿Queridos viajeros, que os trae a nuestra ciudad?.
"Quizás la curiosidad felina, que nos impulsó a ver más allá de la niebla", dijo Dandy, "pero díme, quienes sois y que lugar es este?"
"Yo soy Azzurra, la guardiana de la niebla y estos son Juditha y Sansone. A los demás compañeros, ya los ireís conociendo. Este lugar es el hogar de los gatos guardianes de la ciudad, la ciudad en la niebla".
"¿Cual es la causa de esta densa niebla?", preguntó Gina.
"Es una triste historia, que ocurrió hace ya siglos. Cuando hayaís descansado y tomado un poco de leche caliente, os enseñaremos la ciudad y os contaremos su historia", dijo Azzurra.
"Bien, vamos allá", dijo Gatsby, relamiéndose sus largos bigotes, todavía manchados de leche.
La amable Juditha se colocó junto a Gatsby y Sansone se puso al frente del grupo. También nos siguió una gatita rayada y blanca.




Recorrimos calles desiertas. Llegamos a un rio, cruzado por varios puentes, atravesando uno de ellos que parcía tan viejo, que parecía increíble que pudiese sostenerse. Ambos lados del punte estaban plagados de comercios en cuyos escaparates refulgían las piedras preciosas, el oro y las joyas mas valiosas que nadie pudiera imaginar, pero no había nadie en ellos. Solo nosotros, los gatos, y la niebla.
"¿Porqué está todo tan solitario?", preguntó Gatsby, "¿Donde están los habitantes de esta ciudad?".
Fué Azzurra quien habló, "Esta ciudad fué en otro tiempo cuna de la cultura, la riqueza y el arte. Sus palacios y museos eran la admiración de propios y extraños. Sus plazas y calles bullían de actividad y eran invadidas por innumerables visitantes, que admiraban sus estatuas, sus fuentes y su magnífica catedral de mármol de colores. Sus habitantes vestían ropas elegantes de tejidos carísimos. Sus comercios dejaban boquiabiertos a los extranjeros. Todo el que tuviera dinero, podía comprar cuanto desease, joyas, dulces, muebles antiguos, preciosos tejidos brocados o prendas de lana tan finas que parecían tela de araña. El problema era que los habitantes de la ciudad, en su afán de lujo, utilizaban con excesiva frecuencia pieles de animales para sus vestidos, botines y abrigos. Sus vidas parecían no tener ninguna importancia y cada vez quedaban menos".
Seguimos andando y atravesamos una galería, flanqueada a ambos lados por figuras y llegamos a una plaza muy amplia con un palacio flanqueado de escudos multicolores y una torre coronada.La plaza estaba adornada por una gran fuente con caballos y preciosas estatuas, pero no había nadie en las calles. Solo gatos. Solo niebla










martes, 20 de noviembre de 2007

Topadas y reencuentros































Era una gélida mañana gris. El sol ni siquiera atisbaba entre la densa capa de nubes. El suelo estaba todavía cubierto de escarcha de la noche. Por el camino iban caminando dos gatos, muy de puntillas, para no enfriarse las patitas. Parecían conocerse desde hace tiempo. El mayor de los dos era un gran gato pardo de cabeza redonda y bigotes rizados. El otro era un gatito jóven de color gris rayado. El mayor iba canturreando una cancioncilla con su aguda y sonora voz y el pequeño le hacía coro y saltaba alegremente de un lado a otro. El frío no parecía quitarles el buen humor.


De pronto, obsevaron a lo lejos que las nubes se habían condensado tanto que no s podía ver nada.

"Quizás fuese mejor cobijasrse en una cueva, parece que tendremos tormenta ", dijo el gato grande, "vamos a buscar, mira, allí parece que hay una bastante acogedora y protegida por matorrales". Con una topada de su gran cabeza, apartó el matorral y su cara de sorpresa no fué menor que la de aquellos que habitaban en la cueva.


"¿Pero quienes sois vosotros y como osaís invadir nuestro territorio?", les dijo un gran gato rojizo de larga melena. "¿Esque no conoceís las normas de respeto felino?".


"Sentimos molestaros, pero ncesitamos protegernos de la tormenta. Hemos llegado hace poco y venimos en son de paz. Yo soy ÓSCAR aus dem Botanischen Garten y este es ELVIS, de la estirpe de los gatos azules. Quienes sois vosotros?".


"Yo soy GATSBY y estos son DANDY, GINA, TUSHA, PUSHKIN y la que duerme en el rincón es TATIANA. Ella también procede de la estirpe de los gatos azules".

"¿Tatiana?", dijo el pequeño Elvis, "ese era el nombre de mi madre. Ella es el motivo de mi viaje hasta aquí". Se acercó sigilosamente y se quedó observando a Tatiana. De pronto, sin poder contenrse, rozó suavemente su cara. Siguió una topada hasta que ella despertó. En principio pareció no reconocerlo, pero después de olfatearse largamente, irrumpieron los dos en topadas y caricias. También Óscar se alegró de volver a ver a Tatiana.


Tras los saludos y presentaciones reglamentarias, fueron inevitables las preguntas, pues es sabido que los gatos son seres muy curiosos.

"¿Cuales son vuestros planes?", preguntó TUSHA, con su mirada inquisitiva y curiosa.


"Yo voy en busca de la Ciudad Santuario de las montañas de Ewigerschnee. Quiero visitar allí a un amigo que me ayudará a ver el futuro".


"Yo, ya he encontrado a mi madre, pero juntos viajaremos hacia Bastis, la ciudad de las sacerdotisas de Bast que cuidan a pequeños gatitos. Quizás allí podamos encontrar a mi hermana Estela y volver a ser una familia feliz".


"Bien, viajaremos juntos, ya que según la brújula que brilla en la oscuridad, vamos todos en la misma dirección. Descansad, porque no tardaremos en ponernos en marcha", dijo Dandy.


"¿Pero no temeís a la gran tormenta que se avecina?", preguntó Óscar, "¿esque no habeís visto esa niebla tan densa?".

"Eso que veis, no es una tormenta. Es la ciudad en la niebla. Es una curiosa historia que nos contarán con más detalle los amables gatos guardianes de la ciudad. Si teneís curiosidad, venid con nosotros y los conocereís".






lunes, 5 de noviembre de 2007

Samhain, la noche entre la vida y la muerte
































Samhain, la noche de las noches. Es la noche de los seres que, como nosotros, han sobrepasado el umbral y han llegado a este mundo en el que ahora nos encontramos. Es la noche en que el velo entre la vida y la muerte es muy ténue y en algunos puntos se rasga y entonces los vivos pueden percibirnos con tanta realidad, como si estuviesemos con ellos. Ellos lo intuyen y tratan de atraernos hacia ellos, encendiendo velas, para que sepamos que nos recuerdan.

También es la noche en que los canales que comunican los nueve mundos, son especialmente permeables. Es pòr eso que seres malignos o perversos pueden pasar de un mundo a otro. Los humanos los conocen cómo brujas, íncubos y almas en pena. Les temen y tratan de engañarlos disfrazándose como ellos. Nosotros les llamamos los errantes y tratamos de esquivarlos, ya que no son buena compañía.



Aquella noche nos reunimos por última vez con nuestros amigos del bosque. La luna estaba menguando, por lo que la noche era oscura. Solo nos alumbraban los destellos de nuestros Seres Luz. Era una noche extraña en verdad. Parecía que había electricidad en el aire. A veces, seres invisibles parecían rozarnos, produciéndonos sensaciones diferentes. Algunos nos acariciaban, como un viento cálido en la fria noche de otoño. Otros nos estremecían.

Hablamos y hablamos hasta bien entrada la noche, pero aún así, se nos quedaron tantas cosas por decir. Por un lado hubiéramos querido quedarnos con ellos, por otro, sabíamos que debíamos continuar nuestro viaje.


A la mañana siguiente, ellos aún dormían cuando emprendimos nuestro viaje. El bosque estaba en silencio. Solo las aves que anuncian el amanecer. Nuestras patitas resbalaban sobre las hojas cubiertas de escarcha. Todavía el sueño entornaba nuestros ojos y nuestros músculos estaban algo entumecidos por el relente.

Atrás quedaron nuestros queridos amigos del bosque. Sus voces y sus amables consejos todavía resuenan en nuestros oidos. Sus regalos todavía nos acompañan y algunos como, la brújula que brilla en la oscuridad o el saco de los deseos, nos serán útiles en nuestro viaje. De alguna forma continuarán con nosotros hasta que nos volvamos a encontrar.


En nuestro camino a través del bosque, hemos visto criaturas y plantas de todo tipo. Airam es una enamorada de las plantas. A cada paso, se queda extasiada cuando descubre alguna flor desconocida para ella. Siempre nos cuenta que tenía un precioso jardín, lleno de árboles altísimos, en el que había figuras de piedra y una casa llena de libros y hasta un piano.


"¿Que es un piano?", preguntamos a coro.

"Un piano, para que lo entendaís, es una caja de madera de la que se puede sacar música con las manos", dijo Airam

" ¿Y que es música?", preguntó Tatiana.

" Como os lo explicaría...... es, como si combinando muchos sonidos, se construyera algo que se pudiese cantar".

"¿Podría hacerse música con nuestros maullidos?", preguntó Gatsby.

"Pues claro, de hecho, hay unos gatos muy famosos que cantan canciones de Navidad. Creo que se llaman los JINGLECATS".

"¿Podemos intentarlo nosotros?", preguntó Tusha.


Tan animados íbamos en nuestra conversación, que no reparamos en que habíamos llegado a un cruce de caminos. Allí, sentado en actitud espctante, había un esbelto gato negro que no dudó en dirigirse a nosotros.


"Espero que perdoneís mi interrupción. Acabo de llegar y estoy buscando el bosque de Hundertaugen. Me han dicho que debo dirigirme allí si quiero encontrar a mis viejos compañeros".

De pronto, Tatiana avanzó hacia el como si lo conociera " Tu eres, te pareces tanto a mi amigo...Pinocho"

"Claro, yo soy Pinocho y tu eres...¿Tatiana?, ¿pero que haces tu aqui?"

Tatiana y Pinocho se olfatearon largamente y cuando se hubieron reconocido se dieron muchas topadas cariñosas. Tatiana quiso saber noticias de su familia, de su pequeño Elvis. !Pinocho parecía tan feliz y lleno de vida!


Después de contar uno y otro cómo habían llegado hasta aquí, nos sentamos un rato con el sobre un muro, para explicarle como llegar hasta el lugar en que habitaban nuestros amigos del bosque, con los que el deseaba reunirse. El camino no era largo ni peligroso, así que si apresuraba el paso, podría llegar sin problemas antes de qu el sol empezase a declinar. Después, el bosque se llenaba de sombras y podía desorientar a un gato recién llegado como el. Así pues, deseándonos suerte mutuamente, dirigimos nuestros pasos en direcciones opuestas.




















jueves, 11 de octubre de 2007

Tatiana, la belleza gris
























Tatiana es una gata nueva. Su juventud y su belleza exótica nos tiene enamorados a todos. No es muy grande, pero es muy esbelta y su pelaje es de un tono gris, algo más claro que el de Pushkin y Tusha. Sus ojos son de un color verde esmeralda profundo. Su mirada es indescriptible y su carácter es totalmente adorable.

Algunos gatos de Hundertaugen, la recuerdan de cuando vivían en su jardín. Matías ya intentó conquistarla por entonces, pero ella era demasiado joven. Ahora lo ha intentado de nuevo, utilizando todas sus dotes de seductor, pero ella parece tener las ideas muy claras. Todo su empeño está en encontrar a su pequeña hija Estela. Ella sabe que está aquí, en alguna parte de Asgard. Ha preguntado a todo el mundo, desde que llegó ayer de madrugada. ¡Esa temible madrugada!.


Anoche, tras los saludos y el recibimiento de rigor, nos pusimos a cubierto para protegernos de la tormenta. Tatiana se sentó con nosotros y nos contó su historia.



El 8 de Agosto del verano anterior , una gata negra llamada Regaliz, dió a luz a cuatro gatitos. Dos gatitas, una negra con bikini blanco y otra gris, que fueron llamadas Tania y Tatiana, y un pardito y un gran gato blanco que no vivieron.




Las dos hermanas crecieron bajo los abnegados cuidados de su madre y se convirtieron en dos gatitas amables y confiadas. Tenían comida, caricias y además, eran libres. Tenían un precioso jardín lleno de altísimas palmeras y árboles de muchos tipos por los que trepar y esconderse. ¿Se podía pedir más?.



La naturaleza siguió su curso y al llegar la primavera, a pesar de todos los esfuerzos de sus cuidadores, Tatiana quedó embarazada. Era una especie de tradición familiar. Todas las gatas de su familia eran muy prolíficas y tenían en sus genes el extraño y poco común color gris.

El 23 de Mayo tuvo tres gatitos, dos negritos, llamados Elton y Estela y un pardito que fue llamado Elvis. Tatiana, con ayuda de Regaliz, los cuidaba y los protegía de las lluvias primaverales y también de los curiosos. Ella era muy delgada, pero comía y comía, para poder alimentar a los tres. Un buen dia, Elton fue adoptado por una familia humana. Ella quedó muy triste, pero comprendió que era lo mejor que le podía ocurrir. Estela enfermó. Un dia se la llevaron y no volvió. Solo quedaba Elvis. Tatiana no esta preocupada por el, porque sabe que es un gato muy valiente y que Regaliz y Fausto, el gran gato gris, hermano mayor de una camada anterior, velarán por el hasta que sea grande.



Tatiana también enfermó y fue enviada a un lugar en el que la cuidaban y en el que había muchos otros gatos y otros animales más ruidosos. No acababa de encontrarse bien. Un dia la durmieron y cuando despertó, su barriga estaba cruzada por una enorme cicatriz. ¿Que le había ocurrido?. Pasados unos dias, la devolvieron a su jardín, pero a pesar de los cuidados y el cariño de sus humanos, cada vez se encontraba más débil. Volvieron a enviarla a aquel lugar donde la habían curado. De madrugada sintió que su cuerpo era leve como una pluma y ya nada le dolía. Entonces apareció aquí.


Aquí nadie ha visto a la pequeña Estela, pero nuestros amigos del bosque nos han contado, que en alguna parte, en dirección hacia el norte, existe unas gatas, llamadas Sacerdotisas de Bast, dedicadas al cuidado de los cachorros que llegan hasta aquí. Viven en un santuario llamado KINDERGARTEN. Su labor es muy especial, ya que los pequeños gatitos no saben orientarse ni buscar alimento y no podrían sobrevivir aqui, ni con la mejor voluntad. Los cuidan y educan hasta que están listos para volver a nacer en una nueva existencia.


Así pués, Tatiana ha decidido acompañarnos en nuestro viaje. Entre todos, la ayudaremos a encontrar a su querida hija.


A nuestros amigos del bosque les cuesta dejarnos ir. Temen por nosotros, pero la suerte está echada y todo está ya preparado. Partiremos en cuanto cesen las grandes lluvias y el cielo deje de rugir.

Nosotros también les echaremos de menos, pero las estrellas dicen que nos volveremos a ver. Las estellas son sabias....












sábado, 22 de septiembre de 2007

Historias de otoño





















































































Hola, soy TUSHA.
Como he sido el último en llegar, me han permitido que cuente mis experiencias. He de reconocer que el principio fue muy duro. Aunque vuelvo a encontrarme sano y fuerte, estaba muy triste. No podía aceptar mi nueva situación y el hecho de no volver a ver a mis humanos ni a mi queridísima SCHATZY.

Gracias a mis amigos y amigas que ya llevan tiempo aquí, acabé por comprender que mi aflicción era normal. Todos ellos habían pasado antes por ello y su ayuda y cariño es muy importante para mi. Sobre todo GATSBY y DANDY, que a veces me arropaban y me trataban como a un niño. Mi hermano PUSHKIN me anima con sus bromas. Hasta GINA me mira con afecto y me da topadas cariñosas y me dice "Ánimo muchacho, nada es tan terrible como parece. Dáte tiempo y verás..."

La que es un verdadero bálsamo para mi es AIRAM, mi ser luz. Me acaricia con sus pequeñas y cálidas manos y me sonrie con tanto cariño. Me transmite mensajes de ánimo y no me deja que esté triste o tenga miedo.





Ahora que ya empieza a refrescar por las noches, ella pone sus manos sobre mi cabeza y no apaga su luz en toda la noche.

La otra noche me contó que hace tiempo, cuando era humana, tuvo una hija que por las noches tenía mucho miedo a las luces de los faroles de la calle. Éstas proyectaban terribles sombras sobre la pared y la niña no se podía dormir y pasaba las noches encogjda en su cama. Otras veces, conseguía dormirse y tenía horribles pesadillas en las que veía seres de largas piernas o seres blancos muy altos que escarbaban debajo de su cama. Airam dejaba una luz encendida y pasaba noche tras noche con la niña, cantándole la "canción del reloj de cuco", para que se durmiera tranquila. Otras veces, le leía historias de animales, de un libro llamado "El libro de la selva". Y la niña se dormía y poco a poco dejó de tener miedo. También me contó otra noche que en esa época fria que llaman Navidad, en la que los humanos decoran los ásrboles con luces y guirnaldas, la niña miedosa se dormía mirando las luces parpadeantes del árbol de Navidad, abrazada a su oso de peluche blanco.












Seguro que fue una niña feliz.

Los días se vuelven más cortos y los árboles del bosque de Hundertaugen están cambiando de color. Ya no son verdes, sino que van tomando colores amarillos y dorados. Desde hace varios dias, el cielo se ha vuelto profundamente gris. Densos nubarrones morados han cubiero todo. Airam se ha asomado y arrugando la nariz ha dicho "Esta tarde, tormenta" y en efecto, en un momento dado, se ha oído un gran rugido y entre los malhumorados nubarrones se ha abierto un gran boquete y ha empezado a caer tanta agua, que tapaba todo lo qwue alcanzaba nuestra vista. No se porqué he pensado si en mi antiguo mundo también estaría lloviendo y me he acordado de la pobre paloma que veía desde la ventana, que incubaba sus huevos, aunque estuviera cayendo el diluvio.





Moctezuma dice que pronto algunos árboles perderán sus hojas y entonces habrá que protegerse.Nuestros amigos del bosque se están preparando para el frío. Se alimentan más y están acondicionando sus refugios con hojas, para mantenerse calientes. Es lo que los humanos llaman OTOÑO.

Dicen que pronto tendremos que partir. La gran hoja del oráculo del bosque, nos avisó de que debemos dejar el bosque y continuar el viaje que iniciaron mis compañeros hace ya algunos meses. Si no lo hacemos, el tiempo no nos será favorable y no podremos cumplir nuestra misión.
Yo no se a donde vamos. Sólo se que es un viaje muy importante y que hay muchas cosas que ver y que aprender, así que yo me apunto.
Sólo me apena mucho dejar a nuestros queridos amigos del bosque, que tan bien nos acogieron y tanto nos han enseñado sobre como sobrevivir en la naturaleza. Esto ha sido muy útil, para gatos como nosotros que hemos vivido siempre entre almohadones.
Iván acaba de llegar. Es un gato siamés que no tuvo una vida fácil. Al final de su vida, cuando estaba viejo y enfermo, fue dejado a su suerte. Al menos, en el bosque será feliz y tendrá un montón de amigos.











miércoles, 29 de agosto de 2007

TUSHA y la luz que cura







































































TUSHA lleva ya dos semanas aquí. Sigue echando mucho de menos todo lo que fue su vida anterior, pero entre todos intentamos ayudarle e introducirle en este nuevo mundo, desconocido para el.
El encuentro con su hermano PUSHKIN fue muy inesperado para ambos. Los dos quedaron uno frente al otro como si se conocieran de antemano. Realmente no era así, pues eran hijos de la misma gata (Mamá Pushkin), pero de diferentes camadas. Los dos tienen el mismo pelaje gris, siempre de punta, la misma figura ágil y las mismas patas delgadas y largas. Los dos son rebeldes y contestatarios. Como era de esperar, hicieron buenas migas desde el principio. Tusha le contó la historia de cómo Amo le había cazado en el jardín cuando sólo tenía un mes y medio de edad., tentándolo con una lata de sardinas. Luego le llevaron a casa y le pusieron en el pelo un líquido que olía muy fuerte. Desde entonces, jamás volvió a tener aquellos molestos picores.

En cuanto a GINA, creo que ella no había olvidado que en su vida anterior Tusha la había provocado desde que llegó siendo un cachorro diminuto.
Todos, menos ella, rieron cuando les conté, cómo Tusha subió al sofá todo erizado y desafiante y acabó quitándole su lugar favorito.
Con el tiempo, la relación tampoco mejoró y Gina prefirió aislarse. Ahora que los dos estaban aquí, tendrían que poner algo de su parte para solucionar sus desavenencias. Cuestión de tiempo.





Como nos ha ocurrido a casi todos, Tusha suele tener sueños, a veces muy reales, sobre su vida con Amo y Ama. Sueños que casi son viajes astrales, en los que siente que se despierta acurrucado junto a Ama y apoyado en la dulce Schatzy. Nnca se olvida, a no ser que se deee.
Solo el tiempo consigue que el recuerdo sea más llevadero.





Esta tarde hemos estado charlando a la sombra de uno de los grandes árboles. Parecía más feliz y relajado que durante los últimos dias.
TUSHA: "Sabeís, hoy tengo una extraña sensación. Siento como si hubiera vuelto a casa, pero me siento disperso".
GATSBY: "Conozco esa sensación. Según me contó Dandy, eso suele ocurrir cuando alguna parte de nosotros vuelve a casa. Normalmente se trata de cenizas. Puede parecer raro, pero a veces los humanos quieren retener con ellos algo de lo que fuimos. Les da paz."
TUSHA: "¿Entonces, algo de nosotros vuelve siempre a casa?".
GINA: "Bueno, solo en gatos que hemos tenido una familia humana que nos quiso mucho".
MATÍAS: "Es cierto, nosotros los gatos libre, carecemos de ese tipo de experiencias. Yo, por ejemplo, siempre recuerdo mi jardín. El jardín en el que yo fuí amo y señor". "Por cierto, os presento a HERMANN y a ELOÍSA que acaban de llegar de allí". "¿Que tal sigue nuestro jardín?". "?Quien es mi sucesor?"
ELOÍSA: "Poco podemos contaros, pues permanecimos por un tiempo muy corto allí. Solo podemos deciros que los humanos seguían cuidando de los gatos. Por el momento no ha surgido ningún lider, que te sustituya. Se habla de vacío de poder, aunque hay algún gato joven que promete."

MATÍAS: "¿Que fue de aquél siamés grande y pendenciero que entró a provocarme?, creo que lo llamaban Faraón."
HERMANN: "Nunca supimos ya de el. Supongo que siguió siendo el rey de los gatos de la calle".

Como todos nosotros, Tusha también tiene un ser LUZ que le protege y le cuida. Se llama AIRAM y es muy especial. Llegó poco después que Tusha.
Es más pequeña y delgada que los demás seres Luz. Su pelo es rubio y rizado, como un pompón.
Tiene unas manos delicadas y siempre cálidas. Parece un poco mandona, pero dicen que tiene la virtud de curar y hacer olvidar la tristeza.
Cuentan que en otro tiempo y lugar curó a muchos niños enfermos.
Le apasionan los animales y sabe contar muchas historias sobre ellos.















































miércoles, 15 de agosto de 2007

Una misión urgente

Aquella noche tuve pesadillas. Veía a mi amigo TUSHA que quería volver a casa y a Amo y Ama. De pronto, todo se volvía rojo. Luego negro. Luego nada. Vacío.
Noté que alguien me tocaba. Era LAIKA. "Despertad, teneís que volver a Hundertaugen. Es urgente, alguien necesita vuestra ayuda.
Después de recoger nuestras cosas y tomar un pequeño bocado, nos despedimos de nuestros nuevos amigos y de LAIKA y emprendimos nuestra marcha. Esta vez, debíamos seguir un trayecto más corto y caminar deprisa, así que BORIS y DOBY nos acompañaban, para protegernos de posibles encuentros con los mutantes del bosque.
Llevabamos varias horas andando. Los pájaros cantaban a nuestro alrededor. De pronto, se hizo el silencio.
Sobre un montículo, en frente de nosotros, vimos 4 criaturas extrañas. Eran seres irreconocibles.

"Mutantes", dijo BORIS, "espero que no nos den problemas".








El que parecía el jefe, era un ser, con cabeza de león, pero que andaba a dos patas. Un extraño paso en la evolución.
Se aproximaron, con intención de cortarnos el paso y quizás de amedrentarnos.
"Cómo os atreveís a entrar en territorio de mutantes", dijo el león, "¿acaso ignoraís que es peligroso?".
DOBY, el valiente perro vigía, se abalanzó hacia ellos y, enseñando sus afilados colmillos, gruñó "No deis un paso más", "¿Quienes sois?".
"Yo soy Loënmann, el más fuerte", contestó el león, "y estos son Affmann, Wulfmann y Kuhala". ¿Que haceís aquí, y cual es vuestro propósito?.

Esta vez fué BORIS, el pacificador, el que contestó. "Somos BORIS y DOBY de HundeAsgard, que acompañamos a nuestros amigos gatos. Ellos deben volver a Hundertaugen, porque deben realizar una misión urgente. Es la razón de que hayamos acortado por vuestro territorio. De no ser así, podeís estar seguros que hubieramos dado un rodeo. No pretendemos alterar vuestra vida ni vuestras costumbres".
"Está bién", dijo Loënmann, "podeís pasar, pero si quereís un consejo, tened cuidado con los mutantes lacustres. Poneos estas hojas de hiedra en las orejas, sinó os embaucarán con sus cánticos y os desviarán de vuestra misión.

Después de agradecerles sus consejos, continuamos nuestro viaje. Despues de varias horas de camino, a través de un bosque denso y fragoso, observamos que el suelo era cada vez más verde. Los líquenes cubrían los troncos de los árboles y los helechos eran tan altos, que casi no nos dejaban ver. La humedad ambiental, denotaba la proximidad de algún rio o lago.
DOBY, que nos precedía dio la voz de alarma. "Detenéos, compañeros. Creo que nos hemos topado con algunos lacustres. Será mejor que introduzcaís estas hojas de hiedra en vuestras orejas".
Así lo hicimos y nos dispusimos a bordear un hermoso lago.






Vímos un pez con cuerpo de humana, que descansaba sobre un enorme caracol y unos caballos que parecían hechos de agua.

Era claro que intentaban comunicarse con nosotros pero, gracias a las hojas de hiedra de los mutantes, no podíamos oirlos. Sus voces eran tan agudas que notábamos la vibración en nuestro pelaje.
Avanzamos siguiendo nuestra ruta preestablecida.


Cansados y con nuestras almohadillas plantares desgastadas, llegamos al fin al límite de HundertAugen. Era el momento de despedirnos de Boris y Doby, lo cual hicimos agradeciéndoles su gran ayuda. Ya siempre seríamos amigos.
Matías nos esperaba con impaciencia. "Llegaís justo a tiempo. Aún hay luz diurna. No perdaís más tiempo. Dirigíos al pozo de la Nueva Vida. Os están esperando. Rápido."
Caminamos en dirección a un pozo, situado en medio de un prado cercano. Oímos maullidos pidiendo ayuda en su interior. Primero fui yo, Gatsby, quien se inclinó a ver quie nos reclamaba. Oï un "NOOOOOOO!!!!". Aquella voz........ ALargué mi pata peluda y rojiza y una fina pata blanca se agarró a la mia. Lo sujeté firmemente y de pronto me di cuenta .... "TUSHA, amigo, pero ¿que haces tu aqui?".
"¿GATSBY?, pero ¿que sitio es este, como he llegado hasta aquí?. Tusha salió del pozo, sacudiendo su pelaje de terciopelo gris y blanco. Su cara denotaba sorpresa. Todavía no comprendía nada.
"Solo recuerdo que estaba enfermo desde hacía algún tiempo", dijo TUSHA, "Por cierto, ¡me siento como nuevo!. ¿Donde están Amo y Ama?. Sabes, durante un tiempo estuve algo enfadado con ellos. Me llevaban a un sitio donde me pinchaban en las patitas y luego me dolían un montón. Además, me daban una comida horrible que parecía corcho. Ültimamente todo mejoró. Me daban jamón en todas las comidas y Ama me cepillaba constantemente . Estaba encantado.¿Que me ha pasado?. Lo último que recuerdo es que muy pronto por la mañana me llevaron a un sitio y me pusieron sobre una mesa muy fria. Ama me acariciaba y me decía que me quería. Apoyaba mi cabeza con su mano. De pronto me quedé dormido. Oía la voz de Ama a lo lejos y un sonido rítmico POM POM, POM POM. Silencio. Luego noté mucho frío y todo estaba oscuro y aparecí aquí. ¿Que sitio es este?. Quiero irme a casa."
"No puedes irte a casa, ahora estás en el cielo y esta es otra vida"
"¿Cuando volveré a ver a Amo y Ama?. Quiero verlos. Seguro que me están buscando".
"No te preocupes, algún dia todos volveremos a estar juntos. De momento, intenta pasarlo bien aquí. Seguro que hay gatos aquí que conoces y otros que te gustará conocer. Yo te ayudaré."

Entretanto, Dandy estaba ocupado ayudando a salir del pozo a otro gato. Se llamaba OTTO y acababa de llegar del Jardín Botánico. Seguro que tanto TUSHA, como OTTO, tendrían muchas cosas que contar y que aprender. Pero aquí tenemos todo el tiempo del mundo.

lunes, 6 de agosto de 2007

Hundeasgard II

Un perro negro de patas larguísimas y orejas recortadas nos cortó el camino.
"Alto ahí", nos dijo, "¿Quienes sois y como osaís aproximaros a nuestro refugio?".
"Primero dïnos quien eres tu", le espetó Dandy sin inmutarse lo más mínimo.
"Yo soy DOBY von Dobermann, del Noble Clan de los Perros Vigías. Nuestra misión es mantener alejados a todos los posibles intrusos como vosotros. En este bosque hay a veces criaturas extrañas. Me dirás de una vez a qué habeís venido y porqué llevaís a uno de los nuestros con vosotros?".
"Yo soy DANDY aus dem Botanischen Garten. Todos nosotros somos gatos. Vivíamos en KATZENASGARD, pero hemos comenzado un viaje iniciático. Al llegar a este frondoso bosque, encontramos a muy buenos amigos de HUNDERTAUGEN, pero también encontramos a la perra LAIKA, que estaba perdida y le prometimos traerla hasta aquí".
"Está bién, ¿cual es la contraseña?", preguntó Doby con cierta brusquedad.
Dandy quedó pensativo. No recordaba que nadie hubiera mencionado tal cosa. De pronto, nuestro amigo, el pájaro de color escarlata, cantó su inevitable "Rrrecuerda, BARABÚ, BARABÚ.
"¿No será quizás BARABÚ, BARABÚ?", contestó GATSBY.
En ese momento se acercó un perro grande, de melena color canela y cara sonriente. "En efecto, esa es. Está claro que vuestra intención no es hostíl, puesto que habeís arriesgado mucho por traer a Laika con nosotros. Seamos amigos. Yo soy BORIS aus SEGAROVO, del Noble Clan de los Perros Pastores. Sed bienvenidos en nuestro refugio.
Una perra del Clan de los Perros Vigías se acerccó a Laika y lamiéndole la cara le dijo "Soy RASPA von Dobermann y te acepto como amiga. Sentémonos y cuéntanos tu historia.
Nos acomodamos como pudimos sobre unas rocas y Laika repitió la historia que ya nos había contado hace tiempo.A veces era un poco difícil entender el idioma tan gutural de los perros. Además, todos querían tener el último ladrido y se ladraban sin parar unos a otros, pero poco a poco nos fuimos acostumbrando.
Había otros muchos perros como, por ejemplo, MAX y MORITZ, los amigos inseparables del Clan de los Pastores . También había un pequeño perro blanco muy simpático llamado SILVER, que se sentó a nuestro lado, como si fuera uno de nosotros.

De pronto, un perro de larga melena negra y gesto altivo, llamado FRITZ, se subió a una roca más alta y, levantando su afilado hocico hacia la luna y emitió un sonido agudo y ululante. Los demás siguieron su ejemplo, en una ceremonia mística que recordaba a sus antepasados, los lobos salvajes. Era un sonido estremecedor que, por suerte duró solo pocos minutos.
Pasamos la noche con ellos en aquél jardín tan extraño, con aquellas figuras de piedra y los matorrales altos, como si hubiera sido abandonado hace tiempo.
Antes de dormirnos, BORIS nos ofreció su ayuda para cruzar el bosque, para evitar que fuésemos molestados por mutantes o sufriésemos algún peligro. Era un perro verdaderamente amable, con el que era fácil hacer amistad. Nos confesó que los gatos siempre le habían caido simpáticos porque había convivido con algunos de ellos en su vida anterior y los conocía bien.
La noche era algo fresca. Me dormí pensando en la famosa leyenda de la enemistad entre perros y gatos y en la armonía que reinaba allí.










viernes, 3 de agosto de 2007

Hundeasgard





















Ya llevábamos más de 15 lunas con los gatos del bosque. Eran muy amistosos y la vida con ellos era agradable. Todas las noches, después de cenar, nos sentábamos en el gran claro a la luz de la luna y escuchábamos sus historias. Nosotros les hablábamos de nuestras experiencias y proyectos y ellos nos aconsejaban sobre nuestro viaje. Durante el día, descansábamos a la sombra de los frondosos árboles, que nos protegían del caluroso verano.
Lo único que creaba una cierta intranquilidad entre los gatos era Laika. Muchos de ellos no comprendían que los modales y la mímica de los perros eran diferentes a los nuestros. Algunas veces incluso, sus gestos de alegría desbordante, sus saltos y sus ladridos, eran mal interpretados por algunos compañeros.
Laika tampoco había tenido nunca amigos felinos hasta que llegó aquí, así que a veces se creaban malentendidos. Ella se sentía triste y algo aislada, así que nos dimos cuenta de que había llegado el momento de acompañarla a HUNDEASGARD para que estuviese con los suyos y se sintiese comprendida y arropada por ellos.
La noche anterior, pedimos a nuestros amigos que nos indicasen el camino. Sentados en círculo a la luz de la luna, Moctezuma con una de sus uñas nos trazó un mapa en la tierra. Debíamos avanzar durante una jornada siempre hacia el oeste. Nos insistieron mucho en que tuviesemos cuidado con los mutantes.
"¿Que o quien son esos mutantes?", preguntó Gina.
"Los mutantes son seres que, infringiendo las leyes de su especie, se cruzaron hace mucho tiempo con seres diferentes", nos dijo Moctezuma, "son completamente impredecibles, tened mucho cuidado".
Nuestro amigo el pájaro de color escarlata nos indicaría el camino. Antes de irnos a dormir, nos despedimos hasta la vuelta.
Anduvimos por caminos y veredas, por zonas más escarpadas en las que la vegetación era tan espesa que parecía que nunca nadie hubiese pasado por allí. Algunas zonas del bosque parecían impenetrables.
Matías nos dijo que el viaje podía hacerse en un dia, así que aunque nuestras patas estaban cansadas, decidimos no detenernos, para poder volver cuanto antes con nuestros amigos.
De camino, vimos animales que nos eran desconocidos. Algunos, parecían asustados y otros emitían sonidos ululantes que nos asustaban.
"Son quizás esos los mutantes"?, pregunté a Dandy.
"No lo creo" me contestó. "Parecen lobos, los antepasados salvajes de los perros. Tal vez nos estamos acercando a HUNDEASGARD y sean simplemente perros vigías".
Así era, en efecto., Poco después, oímos desde lejos un gran estruendo. Eran ladridos. Por fin habíamos llegado a nuestro destino.
Antes de que nos diésemos cuenta, nos vimos rodeados por varios perros. Los había de todos los tamaños y colores.









domingo, 15 de julio de 2007

Nuestros amigos del bosque

























































































































Nos sentíamos muy bién con aquellos nuevos amigos. Eran gatos que habían vivido la vida libre y tenían mucho que contar. Sus historias eran todas agridulces, mezcla de amor humano, desarraigo y sobrevivir en las calles y las ciudades humanas, con sus peligros constantes. Algunos, como Matías y Moctezuma, fueron verdaderos líderes en su territorio, admirados y respetados, tanto por los gatos como por los humanos que los cuidaban. Curiosamente, todos ellos procedían del mismo jardín en que vivieron Gina y Dandy.
MATÍAS


Matías nos contó cómo después de varios años de peleas, consiguió imponer el órden y cómo llegó a tener una abundante descendencia. Todos blancos y negros, como el. Un mal día entró en el jardín un gran gato siamés, oscuro y provocador. Matías le persiguió hasta la calle para preservar su territorio, pero algo grande y brillante se abalanzó sobre el y le golpeó . Todo fué muy rápido. Sin saber como, apareció aquí.

MOCTEZUMA
Moctezuma, el otro líder, un gato negro de gran cabeza. Nunca necesitó imponer el órden en la colonia. Simplemente todos los gatos le obedecían. Tenía una gran fuerza mental y su mirada era de un verde magnético. Nos contó que procedía de una calle muy peligrosa, cercana al puerto. Un día le llevaron a aquel jardín tan querido. Su sistema era el respeto. VIvió varios años felices en el jardín. A veces se encontraba enfermo y los humanos le trasladaban a un lugar, en el que había muchos gatos y le cuidaban. Luego volvía a su jardín, como si no se hubiese ido y todos los gatos le saludaban con respeto y consideración.

Conocimos a otros muchos gatos más como, por ejemplo, a IGOR con su ojo pirata y a Lennon, el gato protesta blanco y negro, o VÍCTOR, el gato pardo que cantaba a la luna con voz desgarrada.También a las inseparables amigas siamesas, Ming y Fellini, por fin juntas otra vez. MING y FELLINI


DIANA ENYA
Me apenaban especialmente dos jóvenes gatas que había llegado recientemente. Eran Diana, tricolor de brillantes colores y Enya, una belleza gris de ojos de color cobre. No comprendían que les había ocurrido. No parecían aceptar dónde estaban ni llegaban a encontrar su lugar en aquel mundo nuevo, tan extraño para ellas. Cuesta entender el tránsito entre los dos mundos y ellas llevaban muy poco tiempo. Intenté explicarles que era cuestión de tiempo. Moctezuma con su gran personalidad de druída, nos hizo mirar al cielo estrellado. Nos contó que muchas estrellas tienen nombres de animales como, la constelación del cisne, la osa mayor y la menor, la constelación del perro, del caballo e incluso una llamada del "ojo de gato."

Nos dijo, que cada pequeño punto luminoso que brillaba en aquella oscuridad profunda era el espíritu de uno de nosotros que había seguido el camino que ellas acababan de recorrer. Formabamos parte de un universo sin fin. En el, nada se pierde ni ocurre por azar, sino que formamos parte de un constante proceso de renovación y transformación que nunca se detiene.

Era un verdadero placer escucharle. Parecía tener respuestas para todo. Quizás pudiera aclararme algunas de mis muchas dudas.
























domingo, 24 de junio de 2007

La noche del Solsticio de Verano



























































































Una vez que Laika fue aceptada en nuestro grupo, continuamos nuestro camino. Nos precedía corriendo y saltando, como una especie de avanzadilla. Su alegría era desbordante.Caminamos durante varias horas más, todavía con luz diurna, ya que nos encontrabamos en el día más largo del año. Nuestra intención era no posponer demasiado nuestra llegada al bosque. Si nos deteníamos, el viaje se haría demasiado largo. Por fin, comenzó a oscurecer. Entre las primeras sombras, vislumbramos una densa arboleda. Parecía que por fin habíamos llegado.

La oscuridad no era completa, pero el bosque parecía lleno de misterios. Los árboles parecían tener caras y brazos. Un replandor azulado se filtraba entre ellos.

De pronto, entre la espesura oímos un crujido. Teníamos la extraña sensación de que cientos de ojos nos observaban
Caminábamos apiñados, por lo que pudiera ocurrir. Laika gruñía ligeramente.
Algo o alguien, se movía por la espesura. Seguimos avanzando con cautela, muy despacio. Inesperadamente, se abrió un gran claro ante nosotros. Estaba iluminado por una curiosa luna azul. En su centro había unas piedras verticales que formaban un círculo. Ante nosotros apareció de la nada un enorme gato blanco con manchas negras. Su cara era muy redonda e irradiaba una gran sensación de autoridad. Como por arte de magia, en un momento, nos vimos rodeados por gatos de todos los colores que nos observaban con curiosidad.
MATÍAS
El gran gato blanco y negro se dirigió a nosotros andando majestuosamente "Bienvenidos a HUNDERT-AUGEN, en el Bosque de SCHATTEN, me llamo Matías y soy el jefe de los gatos de este bosque. ¿Quienes sois y a dónde os dirigís?. ¿Porqué llevaís a un perro en vuestro grupo?."
Les contamos nuestra historia y nuestra intención de cruzar el bosque, acompañando previamente a Laika con los de su especie. "Sed bienvenidos a nuestro refugio", nos dijo. "Llegaís en la noche de la Luna Azul del Solsticio de Verano. Es una luna mágica que sólo se da cada 2 años y medio, cuando coinciden dos lunas llenas en un mismo mes. Es una luna de magia y misterio dedicada a Selene, la diosa de la luna. Cada año celebramos el solsticio, pero esta luna es especial y muy generosa".

Nos sentamos en círculo, alrededor de aquellas curiosas piedras. Nuestras Luces bailaban bajo aquel hermoso reflejo azul, canturreando una canción.

En este noche de la Luna Azul mágica de Selene,
Señora, escucha nuestra petición y un favor concédenos.
Realiza tu amorosa magia en todos los aspectos de nuestra vida,
bendícenos con sabiduría y protección de noche y de día.

El cielo se volvió de pronto de color. Era un ambiente propicio para confidencias y también ellos nos contaron su historia.




















jueves, 21 de junio de 2007

LAIKA, una amiga diferente








































De nuevo nos pusimos en camino..Íbamos charlando tan animadamente, que recorríamos caminos y cuestas casi sin darnos cuenta.


Nuestros seres LUZ nos guiában y de vez en cuando se reunían para comentar el camino a seguir. Su ayuda era inestimable. Parecía que conocían todo al dedillo y que ya habían estado allí antes.

La tarde era agradable. Se notaba una brisa fresca, que nos aliviaba del entrante verano. Los pájaros revoloteaban a nuestro alrededor. Uno de ellos me llamó especialmente la atención. Era de color rojo escarlata. Se iba posando en los abetos, que eran cada vez más frecuentes y repetía una y otra vez la misma cantinela: BARABÚ, BARABÚ, BARABÚ. Se alejaba, volvía a posarse y de nuevo cantaba BARABÚ, BARABÚ, BARABÚ. Parecía querer decirnos algo, pero ninguno de nosotros conocía el idioma de esos pequeños seres. ¿Tendría su canto algún significado?. Por si a caso, trataría de recordarlo.



La tarde iba cayendo. Poco a poco iba oscureciendo. yo iba ensimismado pensando en el significado del mensaje de aquel curioso pájaro cuando de pronto, al entrar en un camino arbolado, vímos a lo lejos un ser totalmente desconocido para mi. Era bastante más grande que yo, que soy el mas grande entre nosotros. Su pelaje era negro y tenía las orejas algo caidas y un morro cuadrado y de nariz puntiaguda. Parecía asustado porque todo su cuerpo temblaba y emitía un extraño sonido, que sonaba algo parecido a HIIIIP, HIIIIP.



Cuando nos vió, comenzó a mover la cola de un lado a otro y echó sus orejas hacia atrás. Yo, con mi mentalidad de felino, pensé que estaba enfadado o nos estaba acechando. Ralentizamos algo nuestro paso, hasta ver cuales eran sus intenciones. Estaba claro que era un "no gato" pero, en ese caso, ¿que hacía en el cielo de los gatos?
"Que animal tan extraño", dijo Gina, "¿habeís visto alguna vez alguno parecido?".

"Ese animal que veis", nos dijo Dandy, "es lo que se conoce como un perro. Que no os confunda su lenguaje corporal. Ellos se expresan, en general de forma opuesta a la nuestra. Su movimiento de cola y orejas plegadas, no significa amenaza alguna sino, por el contrario, que se alegra de encontrarnos. Quizás haya llegado aquí por error. Parece bastante asustado. Intentemos comunicarnos con el.

Dandy se dirigió balanceándose sinuosamente hacia aquel animal y le dijo "Hola, ¿quien eres y cómo has llegado hasta aquí?. Por si no lo sabes, este es el cielo de los gatos o KAT-ASGARD".

Más o menos, esto es lo que entendí de su historia, ya que algunas expresiones caninas, me eran desconocidas.

WAU, WAU, hola, me llamo LAIKA y soy una perrita. Yo vivía con mi familia humana en una ciudad grrande, de la que contaban que hace años estuvo separrada por un muro . Esto hacía muy infelices a sus habitantes, hasta que un día el muro cayó y hubo una grran fiesta. ARRRF, ARRRF!!!
Yo crrrecí allí desde que erra un cachorro. ¡Erra tan feliz jugando, saltando y corriendo por el jarrdín!. ARRRF, ARRRF. Tenía una vida preciosa. Mis humanos me adorraban y yo a ellos. Yo erra una parte muy imporrtante de la familia. Esta felicidad durró 13 años humanos, perro no hace mucho, empecé a sentirrme hinchada y cansada. Ya no tenía ganas de jugar ni correr. Sólo querría estar quieta en un rincón. Entonces mi humana Marlén, me llevó a un lugar en el que humanos vestidos de verrde me hicierron muchas prruebas.
Cada vez me encontrrraba más cansada y mis dolores eran cada vez más fuerrtes. De nuevo, Marlén me llevó a aquel lugarrr. Por alguna causa que desconozco, caí en un prrofundo sueño y aparrrecí aquí, como por arrrte de magia. Ahora me siento otra vez como nueva y mis dolorrres han desaparrecido. ¿Podeís decirrme cómo puedo volverrr a mi casa?.

"De momento, tendrás que quedarte aquí y conformarte con nuestra compañía", le explicó Dandy, "nosotros vamos de viaje hacia el Bosque de SCHATTEN, que limita también con HUNDE-ASGARD o cielo de los perros. SI quieres puedes acompañarnos hasta allí, pero deberás respetar nuestras costumbres. Algún día volverás a ver a tus humanos, pero deberás tener paciencia".
"Os quedarrré eterrnamente agrradecida, ARRF, ARRRF", dijo Laika con garandes saltos de alegría, "iré con vosotrrros hasta alí. WAU, WAU, vamos, vamos!!.

Como todos nosotros, Laika parecía joven y sana de nuevo. Saltaba y corría, loca de alegría por haber encontrado compañía, aunque fuera diferente a ella. Ya no estaba sola en aquel mundo nuevo para ella.

Tanto para ella, como para nosotros, sería un reto el conocer y aceptar costumbres tan diferentes. Pero los animales sabemos comprender mucho más de lo que los humanos imaginan.