domingo, 8 de abril de 2007

Mis primeros recuerdos










Había estado lloviendo todo el fin de semana sin parar. Si esto es a lo que llamaban buen tiempo...
Así que, como no podíamos hacer otra cosa, me decidí a contar mi historia.


VIERNES:



LADY LUCY
BODY GUARD
Con mis hermanos

Lo primero que recuerdo era una maravillosa sensación de calidez y protección. Eso si, todo estaba oscuro. Sentía un burbujeo y un latido rítmico, o mejor dicho tres. Pasó tiempo, no puedo precisar cuanto.
De pronto noté que me deslizaba sin poder evitarlo. Sentía que perdía aquel bienestar, así que grité y grité. Después noté que algo cálido y peludo me rodeaba y sentí el contacto de una lengua áspera, pero reconfortante. Cuando sentí hambre, un líquido tibio muy agradable se introdujo en mi boca. No podía ver nada, pero me sentía feliz. Intuía que no estaba solo porque oía un ronroneo rítmico. Alguien cuidaba de mi.
De nuevo pasó tiempo. Un día, al despertarme me di cuenta que la luz empezaba a entrar en mis ojos. También empezaba a percibir sonidos. Fué así como me enteré de que tenía un hermano (HARLEY-DAVIDSON) y una hermana (HONEYMOON). A veces tenía que pelear con ellos por la comida pero, poco a poco, empezamos a jugar a saltar y a perseguirnos y cada vez lo pasabamos mejor. Mi madre se llamaba LADY LUCY y mi padre BODYGUARD. Eran unos padres muy cariñosos y sabios, que nos enseñaron todo lo que teníamos que saber para ser gatos formales.
Nos contaron que descendíamos de los grandes gatos de los bosques de Main, en un país al otro lado del gran océano. Dicen que fuimos llevados allí por unos humanos de Híperborea, llamados vikingos. Debido a nuestro rabo poblado y con rayas, dicen las leyendas que descendemos de los mapaches, pero esto no es más que un rumor sin ninguna base.

Pasado algún tiempo, la humana que nos cuidaba, nos metió en unas cajas con barrotes y nos llevó a un lugar donde había muchas cajas con gatos de muchas razas y colores diferentes, gatos sin pelo, azules, gatos de color crema y ojos azules, y otros peludos y muy chatos. Yo no comprendía que estaba pasando, ni porqué me separaban de mi familia, pero intuía que todo iba a cambiar.

Pasaron un par de horas. Entonces vi que había otros dos humanos hablando con nuestra cuidadora. Ella tenía los ojos llorosos, mientras que ellos parecían muy felices. Me sacaron de la jaula en la que estaba y me cogieron al brazo, primero el y luego ella. Por como me acariciaban, supe al momento que nos íbamos a llevar bién.

Me llevaron con ellos en algo que se movía. Me sentía algo mareado pero, sobre todo, estaba muy intrigado por saber donde me llevaban. Siempre tuve un gran espíritu aventurero. Llegamos a una casa muy grande que yo no conocía y en la que vívía desde hacía poco una gata a la que todos conoceís.....GINA








4 comentarios:

ester dijo...

¡Qué bien que recuerdes a tu primera familia! Si, me refiero a esa, a la de los gigantes apacibles, a la de los bosques de Main.

@ndanix dijo...

Si, bueno, quien no recuerda los momentos de su infancia, no?. Pero lo mejor vino depués.....

Unknown dijo...

Me encanta tu historia. Es muy bonita. Tus primeros recuerdos han sido toda una experiencia que pocos logran recordar. Sigue contando tu vida me gusta mucho

@ndanix dijo...

Es bonito recordar pero, a veces, también es triste porque tienes una sensación como de pérdida y vacío. A pesar de todo, quiero recordar cada detalle. Se que no me olvidarán. Dicen que mientras alguien te recuerde, de alguna forma, sigues vivo.
Siento que mis humanos ya no están tan apenados por mi. Hoy mi humano ya sonreía al recordar mi cara de velocidad cuando corría por el pasillo. Mejor así.